Conocida como la planta de Jipijapa, la toquilla o palmera sombrero de Panamá
Los sombreros de Panamá se hicieron mundialmente famosos durante la construcción del Canal de Panamá, cuando se importaron miles de sombreros de Ecuador para los trabajadores y fueron usados por personajes históricos como Theodore Roosevelt, Eloy Alfaro, Napoleón III y Frank Sinatra.
En 2012, el tejido de sombreros de Jipijapa se agregó a la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO. Países como México le han dado a los sombreros nuevos colores, texturas y formas. Varias comunidades mayas del estado de Campeche se han dedicado a la artesanía jipijapa desde 1800.
El proceso de elaboración del sombrero comienza tres años después de la siembra de la jipijapa, para permitir que sus hojas alcancen su tamaño completo. Los brotes se cortan para poder quitar las hojas tiernas y pelarlas con una aguja. Luego, los tallos se hornean con azufre para darle un color blanco amarillento y luego se dejan secar. La calidad del sombrero depende del número de “partidas” las cuales pueden ir de una hasta 8 “partidas”
El tiempo de tejido fluctúa de las veinte horas hasta un mes. La humedad es fundamental para mantener las fibras flexibles como para ser tejidas fácilmente, por eso los artesanos las hacen en cuevas naturales o artificiales. Para mantener la forma del sombrero mientras se teje, los artesanos utilizan moldes hechos con madera local, como guayacán, zapote, Ts’aalam o nogal caribeño. Finalmente, se plancha el sombrero en una prensa especial para darle forma según el modelo.